Bicicletas: la mayor marca europea ensamblará sus modelos en el país

A través de Motomel armará 6.000 unidades anuales, con precios que van de los $ 120.000 a $ 260.000. Specialized podría ser la próxima.

En un contexto de faltantes por el alza de la demanda global, una empresa local comenzará a ensamblar en la Argentina las bicicletas Scott, la principal marca de Europa. Todo es parte de un acuerdo con La Emilia, que importa, produce y distribuye motos y bicicletas con los sellos de Motomel y Benelli, entre otros, El objetivo inicial es armar localmente unas 6.000 unidades anuales, todo bajo supervisión de la casa matriz de Scott, en Suiza. «Arrancamos con 5 modelos, cuyos precios van de los $ 120.000 a $ 260.000«, explicó Javier Mosca, su gerente de División Bicicletas.
A nivel mundial, Scott rivaliza a nivel mundial con las americanas Specialized, Trek y Cannondale, «consideradas como las mejores marcas de bicicletas del mundo», coinciden en el mercado. De hecho, dicen que son comparables a los Audi, BMW o Mercedes Benz en la industria automotriz. Mosca aclara que el ensamblado es la primera parte del plan, pero que «más adelante iremos sumando componentes nacionales, como manubrios, caños de asientos y puños».
La Emilia incursionó en el negocio de las bicicletas en 2017. No es la única. En la Argentina compite con 25 grandes armadurías, entre ellas Dalsanto (Raleigh y KTM), Vairo, Osfrei (Zenith y Pivot), Aurora, Olmo, Newsan y una heterogénea red mayoristas, distribuidores y alrededor de 5.000 pequeños talleres y bicicleterías de barrio. La pandemia y las cuarentenas recalentaron la demanda lo que generó un desabastecimiento generalizado. En la Argentina sucede lo mismo: este año estiman vender 1,8 millones de unidades, un récord.
Scott ya tenía presencia en el país, precisamente a través de Motomel, que era importador exclusivo de la marca. La Emilia tiene su planta en la localidad homónima de la provincia de Buenos Aires, en la frontera con la santafesina San Nicolás. Tiene 370 empleados, de los cuales 35 fueron capacitados para el montaje de bicicletas. «Desde la semana próxima empezaremos a despachar 500 unidades por mes«, adelanta Mosca.
El furor por las bicicletas es un fenómeno global y también en la Argentina. Usada como medio de transporte para evitar las congestiones, la demanda récord provocó faltantes de repuestos y modelos. Lo que repercute en los precios. «Los cuadros de aluminio aumentaron 15% en China, que es la mayor proveedor. A eso hay que sumarle los costos locales (dólar problemas de abastecimiento y trabas a las importaciones)», detalla Mosca, lo que derivó «en un combo letal».
Nicolás Muszkat, director de comercial de la japonesa Shimano, sostiene que en este contexto «muchas bicicleterías cerraron sus negocios y prefieren no vender por temor al costo de reposición». Agrega que la película empezó hace algunos meses. «Entre junio y agosto, en los primeros dos meses de cuarentena, la demanda ya se había duplicado con respecto al año pasado«, dijo.
Shimano es de origen japonés y es la principal proveedora global de frenos, cambios, platos y otros componentes para la transmisión. A pesar de todo, Muszkat cree que la «llegada» de Scott al país es una buena noticia. «Es una de las mejores marcas de bicicletas del mundo, que ahora serán ensambladas en vez importarse terminadas. Es un paso adelante, porque así podrían generarse desarrollos locales. De la otra forma, no «, razona.
La líder mundial es Specialized. La marca tiene oficinas en el país desde 2011 y su country manager, Fernando Ferreyra, dice que a pesar de todas las dificultades, la Argentina tiene un panorama muy promisorio para las bicicletas. «Las marcas internacionales observan que es un mercado muy chico y poco desarrollado, en comparación con Brasil y Colombia y Chile», sostuvo. Con respecto a su marca, con precios de entre $ 115.000 a $ 1 millón, asegura que «despachan entre 20.000 unidades y 30.000 unidades al año». Specialized, adelantó, también tiene en carpeta la posibilidad de ensamblar en el país en los próximos meses.
«Desde el inicio -subraya Mosca-, el objetivo final fue la integración local, nunca nos planteamos la importación como meta: somos una empresa industrial«, concluye el ejecutivo. Por otro lado, asegura que irán sumando nuevos modelos para la marca Scott, que hoy representan el 15% de las ventas de bicicletas de la compañía. El gran escollo es la enorme distorsión de precios, producción y despacho de mercaderías que causó la crisis del coronavirus. Las grandes plantas, localizadas en principalmente en China, Taiwan y Malasia, no dan abasto para responder al recalentamiento global de la demanda.
Tal como ocurre con la indumentaria, la producción de bicicletas se planifican por temporadas. En la industria local describen que habitualmente, las entregas demoraban 6 meses. «El plazo, hoy, se duplicó y tenemos órdenes de compra contra entrega en diciembre de 2021«, dice Mosca. Además de eso, el «riesgo argentino» impulsa la remarcación y las tácticas para defender los stocks de mercadería. «En los últimos meses, los precios subieron muy por arriba de la inflación y algunos modelos llegan a costar $ 2,5 millones. Igual, hay gente que está dispuesta a pagar esos valores», resume Muszkat.