El huracán Florence crece a categoría 4 y ya hay evacuados
Los estados de Carolina del Norte, Carolina del Sur, Maryland y Virginia ya decretaron el estado de emergencia
Estados Unidos se prepara para la llegada de Florence. En medio de la temporada de huracanes en el Atlántico, la costa este del país está a la espera de la llegada del ciclón que ahora es de categoría 4 pero que se espera alcance la máxima potencia. Ante las previsiones de los meteorólogos, Carolina del Norte, Carolina del Sur, Maryland y Virginia ya decretaron el estado de emergencia y evacuaron a más de un millón de personas.
Florence, una tormenta de categoría 4 y la más poderosa que amenaza a la región en casi tres décadas, obligó la huida hacia tierras más altas al tiempo que avanzaba con vientos máximos sostenidos de 220 kilómetros por hora. Los expertos esperan que gane fuerza antes de tocar tierra el jueves, probablemente en el sureste de Carolina del Norte cerca de la frontera con Carolina del Sur, según el Centro Nacional de Huracanes (CNH).
Las autoridades también advirtieron sobre peligrosas oleadas de tormentas en la costa y la posibilidad de que el huracán desencadene lluvias torrenciales e inundaciones generalizadas en varios estados. «Florence sería un huracán importante extremadamente peligroso hasta el jueves», dijo el CNH en su último boletín.
El gobernador de Carolina del Norte, Roy Cooper, dijo en una conferencia de prensa que su estado se encuentra en «el centro del blanco».
Los primeros efectos de la tormenta ya se sentían en algunas islas a medida que fuertes corrientes azotaban las playas y el agua del mar inundó una carretera estatal. Además, algunas aerolíneas comenzaron a permitir que los pasajeros cambien sus planes de viaje cuando se encuentren dentro de la posible ruta del huracán.
La preparación
«Esta es una de las peores tormentas que azotará la costa este en muchos años», tuiteó el presidente Donald Trump . «¡Prepárense, tengan cuidado y estén seguros!», advirtió el mandatario, quien agregó que habilitó el envío de ayuda federal, que había hablado con los gobernadores y que «el gobierno federal está listo para asistir 24/7».
Por su parte, una gran cantidad de escuelas cerraron sus puestas y aún no confirmaron cuándo volverán a funcionar y la Armada indicó que se preparaba a enviar mar adentro a unos 30 buques estacionados que zarparán para evitar daños provocados por los vientos y las fuertes mareas.
Los meteorólogos advirtieron que Florence podría permanecer estancada en tierra firme antes de disiparse, como lo hizo Harvey en Texas el año pasado, lo que aumentaría el riesgo de inundaciones.
Otras dos tormentas se desplazan en el Atlántico. Se prevé que el huracán Isaac pierda fuerza a su llegada al Caribe y que Helena, mucho más adentro en el océano, gire hacia el norte a medida que la temporada de huracanes de 2018 llega a su punto más álgido.
En el Pacífico, la tormenta tropical Olivia provocó que se emitieran advertencias para múltiples islas hawaianas a medida que se desplaza hacia el oeste y podría llegar al estado esta noche o el miércoles en la madrugada.