El Subsidio recuerda a sus usuarios que no es necesario adquirir órdenes
El Instituto de Previsión y Seguridad Social de Tucumán (IPSST) renovó su metodología de atención para que cada vez menos usuarios deban asistir a la Casa Central, el Centro Calidad de Vida y filiales, en el contexto de la pandemia de Covid-19.
Han quedado pocas causas por las cuales recurrir a las filiales o Casa Central. Ya no es necesario adquirir las ordenes de consulta. El usuario puede ir directamente al médico y ahí abona los $50 de copago, que antes se pagaban en filiales o Casa Central. La orden de consulta ya no es necesaria y no se emite”, advirtió el doctor Fernando Avellaneda, interventor del IPSST.
Sin embargo, explicó que aquellos grupos de beneficiarios que quedaron con órdenes de consulta, pueden utilizarlas y no deben pagar los $50. “La mayoría de las consultas se hacen en sanatorios y clínicas, en las guardias de urgencias. Hay muy pocos consultorios trabajado, así que el procedimiento es llevar el DNI, abonar los $50 y eso es todo”, reiteró.
Los análisis bioquímicos se autorizan directamente en el laboratorio. En cuanto a las imágenes, los centros de diagnóstico hacen la autorización en línea de ese pedido, y no es necesario concurrir ni a filiales ni a Casa Central, recordó Avellaneda.
Por otro lado, el Centro de Calidad de Vida, desde principios de abril, implementó un sistema por el que los médicos prescriptores de medicación oncológica, neurológica, reumatológica, etc. las prescriban vía e-mail. “El centro tiene un correo electrónico donde los médicos hacen la prescripción y adjuntan los métodos complementarios necesarios que justifican la medicación. Luego, al paciente le llega una notificación a su e-mail o celular para que pueda retirar la medicación de la farmacia”, indicó el interventor del Subsidio.
Entrega de insulinas
Avellaneda precisó que durante mayo se entregará una parte en el Centro de Calidad de Vida, pero hacia finales de ese mes en adelante la entrega será en farmacias; también se dispensarán en filiales donde haya pocos pacientes, y en lugares donde haya pacientes muy dispersos, la entrega será a domicilio. “La empresa que se encarga de la distribución se comunicará con los usuarios; hemos empadronado a todos nuestros pacientes, agregando correo electrónico y teléfono que permiten contactarnos con ellos”, finalizó Avellaneda.