La senadora nacional por Tucumán fue protagonista durante la primera jornada de exposiciones en el Senado. Cruces en las estadísticas y un fuerte debate que ya comenzó.
Esta tarde el Senado dio inicio a la ronda de exposiciones a favor y en contra de la legalización del aborto. Los senadores pueden hacer preguntas y cuestionar dichas exposiciones durante el plenario de comisiones que cuentan con la presencia de representantes de la salud, del derecho penal y de credos. Entre los 18 expositores que hablaron ante las comisiones de Salud se encontraba la médica y máster en Ciencias de Salud Reproductiva, Mariana Romero, cuyo argumento a favor de la legalización de la Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo generó el cruce de la senadora tucumana Silvia Elías de Pérez.
“Las estadísticas de Uruguay y México prueban que la legalización disminuye las muertes maternas y no aumenta la cantidad de abortos. Nos mata y nos enferma la falta de información, la exposición pública y el maltrato», afirmó Romero. Y agregó: “Los embarazos pueden interrumpirse de manera segura. La tecnología está disponible, tenemos opciones. Sin embargo, la ilegalidad teje una red que nos quita seguridad”. Y aseguró: “En 2016, dos de cada diez mujeres fallecidas durante la gestación, falleció por un aborto”.
Concluida la argumentación de Romero, Elías de Pérez pidió la palabra: cuestionó quiénes financian a Cedes, la fundación de la doctora Romero, desmintió las estadísticas en Uruguay y mencionó el caso de Keyla Jones, la joven de 17 años que falleció en lo que la Justicia si se trató de un caso de mala praxis en un aborto.
Elías de Pérez cuestionó si la Fundación recibe financiamiento de la Planned Parenthood, una fundación de Estados Unidos acusada por sectores conservadores de comercializar órganos fetales. Desde la Planned Parenthood han asegurado que no hacen negocio con los abortos que practican, cobrando tan sólo por los gastos de conservación y transporte de los tejidos fetales a los centros de investigación que los utilizan.
Y la senadora de Cambiemos cuestionó a la médica: “¿Ha recibido, recibe, o viene recibiendo aportes de la Planned Parenthood? Porque en los reportes de la PlannedParenthood ponen los montos que han sido entregados a fundación a la que usted pertenece”. La respuesta de Romero fue: – “Yo soy investigadora de Conicet y Cedes es una institución con más de 40 años. Todos nuestros donantes están en la página web, puede consultarlos. Hemos recibido financiación de la Planned Parenthood al igual que de otras fundaciones o el Banco Interamericano de Desarrollo, o el Ministerio de Ciencias y Tecnología”.
Elías de Pérez retomó la palabra y cuestionó las cifras de mortalidad maternal: “Lo que informa Uruguay en el sitio del ministerio de Salud muestra exactamente lo contrario a lo que usted dice: aumentó la mortalidad materna luego de que legalicen el aborto teniendo en 2002 una tasa de 10,4 y ahora se fue a 17”. Y profundizó en las certificados de defunción y las causas que figuran en el Ministerio de Salud: “Los certificados de defunción son obligatorios, no aleatorios. Según lo que consta en el ministerio de Salud de la Nación, los casos de mortalidad maternal son 245; de ellos 43 son causa de aborto que a su vez son 31 los que se suponen que pueden haber sido abortos causados”.
“He visto los subregistros de muertes materas por todas las causas. No existe un registro sustantivo de muertes maternas por aborto. La discusión si son 43 muertes maternas o 31 por complicaciones de abortos inducidos resulta irrelevante porque es la muerte de una mujer joven y sana”, le respondió Romero.
Por último, Elías de Pérez le recordó el caso de la joven KeylaJones: “Era una chica de 17 años de El Maitén que queda embarazada. Era capitana de su equipo de básquet, va al hospital, accede a un aborto legal de los que están contemplando dentro de los protocolos y muere. La seguridad entra en conflicto”. La doctora Romero prefirió no explayarse sobre el tema: “Conozco el caso, está en la Justicia, no corresponde decir nada sobre ese caso donde está el dolor de una familia y el trabajo de un equipo de salud. Habrá que investigar si la muerte de Keyla fue el aborto, eso está en investigación. Toda práctica médica tiene su riesgo, algunas más, otras o menos. Pero en términos generales, el aborto es una práctica segura si es hecha por un personal capacitado y con la tecnología adecuada”.
FUENTE. eltucumano.com