Jorge Capitanich perdio las paso y busca acordar con sus rivales del PJ
El gobernador kirchnerista necesita un pacto con Gustavo Martínez, Juan Carlos Ivanoff y Domingo Peppo, que en las PASO fueron por afuera y le sacaron votos peronistas. Y pretende que Angel Rozas le de una mano desdoblando elecciones en tres localidades clave.
La carrera de Capitanich fue tan apabullante como meteórica desde diciembre de 2001, dos semanas después de cumplir los 37 años, cuando asumió por primera vez como senador nacional, un sendero que transitó luego ocupando diversos puestos en gran parte de las gestiones nacionales peronistas. Cargo más, cargo menos, siempre cumplió un rol destacado en el círculo de poder del peronismo kirchnerista.
Acaso, con la derrota del domingo en las PASO provinciales, ahora Coqui Capitanich se enfrente con el inicio de una de esas debacles que más duelen: las que atropellan, se imponen sin avisar y aparentan irreversibles.
¿Es así? ¿Los seis puntos que Juntos por el Cambio sacó de ventaja en las primarias son irremontables? La investigación de la desaparición de Cecilia Strzyzowski y su posible asesinato en el que está implicado el mayor socio piquetero de Capitanich, Emerenciano Sena, recién estaría exponiendo los primeros indicios de un clan criminal alimentado y protegido por el poder y la corrupción del gobierno chaqueño.
«Aún así, la lectura que la mayoría hace de la derrota es aventurada. Falta mucho para las elecciones de septiembre. Y si Coqui se mueve con inteligencia no descarto que pueda ganar«, le dijo a Clarín uno de los candidatos a gobernador que ya recibió varios llamados de los peronistas derrotados que se postularon junto a Capitanich.
Ahora Capitanich necesita que el cosmos se ordene en línea recta. Un milagro que desde el mismo domingo a la noche está intentando que ocurra y que desde el vamos tiene tres enormes desafíos.
1) Ir a buscar el apoyo de por lo menos una parte del 42% del electorado que no participó el domingo de los comicios. Se prevé que ese 58 % del padrón que votó en las PASO crezca al 75 % para las Generales de septiembre. .
El gobernador optó para que las PASO sean en medio de un fin de semana largo con la intención de que un sector del padrón no participe. Apostó a que los chaqueños con recursos para irse de viaje son votos de la oposición. Pero cuando se analiza el nivel de abstención, los datos devuelven otra conclusión.
«La mayor merma de votantes comparado con otras elecciones no se dio en los sectores pudientes de los centros urbanos, quizás más proclives a rechazar al peronismo. Fue en las periferias, en los barrios populares. Y es ahí donde Capitanich va a usar toda la estructura y recursos que tenga para dar vuelta el resultado», señaló otro de los candidatos que participó en las PASO:
2) Capitanich necesita unir al peronismo detrás de su reelección. Es decir, negociar para que los que en algún momento fueron sus aliados desistan de sus candidaturas a gobernador y lo apoyen. Ahí están Gustavo Martínez, Juan Carlos Ivanoff y Domingo Peppo.
En esa empresa, está obligado a seducir a Gustavo Martínez, actual intendente de Resistencia. Con el sello provincial CER que él mismo creó para enfrentar al gobernador kirchnerista, Martínez logró casi el 9% de los votos.
«Aunque muchos lo duden, no voy a acordar nada con Capitanich. Si hay algo que nos separa, es la falta de confianza por las veces que no cumplió lo que propone y promete. Mi candidatura a gobernador es indeclinable. Y voy a desdoblar las elecciones a intendente para después de septiembre», le anticipó Martínez a Clarín.
El intendente de Resistencia está enfrentado a Capitanich desde antes de las elecciones de 2019. El domingo, para sucederlo en el cargo de jefe de la capital provincial, compitió su mujer, Elida Cuesta. Salió segunda detrás de uno de los candidatos radicales. El postulante de Capitanich terminó en cuarto lugar.
Muchos ven un acuerdo entre Capitanich y Martínez como algo natural que les conviene a los dos. El intendente baja su candidatura para beneficiar al gobernador y Capitanich le devuelve el favor declinando a su postulante en Resistencia para alimentar las chances de Cuesta.
«Te repito, voy a llamar a elecciones para la intendencia en Resistencia después de las generales a gobernador, donde yo voy a competir. Si yo me bajo, quién me garantiza que Capitanich después no me joda. Preguntale a otros ex socios politicos de él, qué valor tiene la palabra empeñada de Coqui», respondió Martínez.
La impresión que manifiesta Martínez sobre las promesas incumplidas de Capitanich son compartidas por los dos ex gobernadores Domingo Peppo y Juan Ivanoff. Ambos compartieron fórmula con Capitanich, se pelearon y el domingo lo enfrentaron cada uno con un frente propio.
Pero aunque hablen mal del valor de su palabra, Capitanich es un devoto de la magia de la política y está convencido de que logrará que tanto Martínez como Peppo e Ivanoff vuelvan a confiar en él y bajen sus candidaturas. Así lograría unificar a todo el PJ para intentar revertir la derrota de las PASO.
Capitanich fue al menos cuatro veces a visitar a Ivanoff a su casa del Impenetrable chaqueño. Fue a buscar un acuerdo que no consiguió. «Coqui no entiende que la gente lo quiere cada vez menos. Convirtió al Chaco en un Conurbano, con piqueteros mafiosos por todos lados que administran una pobreza cada vez más grande y explosiva», le dice a Clarín el propio Ivanoff.
3) Pero con eso no alcanzaría. La jugada que pergeña el gobernador no está en volver a ganarse la simpatía de los peronistas que lo acusan de traidor, sino echar mano a un sólido acuerdo que todos aseguran que tiene desde hace años con el histórico cacique radical chaqueño, Angel Rozas.
«Desde que fue derrotado en 2007, a Rozas le quedó cómodo el traje de jefe de la oposición sin ánimos de molestar demasiado a Capitanich. La relación entre ambos funciona como una sociedad», describen tanto en la UCR como en el PJ chaqueños.
El poderoso caudillo radical fue, junto a Capitanich, el gran perdedor de las PASO. Su candidato, Juan Carlos Polini, fue superado por otro correligionario más joven que apunta a la renovación radical en el Chaco, Leandro Zdero.
Las malas lenguas hablan de que Rozas podría acceder a un reciente pedido de Capitanich para que se adelanten las elecciones en tres grandes intendencias que maneja el radicalismo: Saenz Peña, Las Breñas y Quitilipi.
«Rozas quedó muy golpeado y nadie sabe bien cómo puede reaccionar. Pero dudo de que Gerardo Morales, que hoy es su jefe político, le permita cumplir con algún viejo compromiso que tenga con Capitanich», le dijo a Clarín un alto dirigente radical de la provincia que estuvo varios años en el Congreso nacional.