Lavigne palpita un Dakar histórico: «Acá hay un apoyo fantástico de las Provincias»
Etienne Lavigne, Director General del Rally Dakar, que en esta edición celebra los 10 años en Sudamérica y Argentina, donde nunca dejó de estar, tiene la calma de quien sabe que pronto entrará en un torbellino inevitable.
«Está todo listo, pero el Dakar te sorprende con una cosa nueva todos los días», comenta en charla con ámbito.com. «Sudamérica y Argentina son una gran parte en la historia de esta competición. Tenemos diez años en común (de los 40 que lleva corriéndose). En la primera edición del Dakar en el continente era impensado seguir por tanto tiempo. En ese momento era imposible pensar a largo tiempo. Y ahora seguimos acá, descubriendo otras tierras así que el balance es muy positivo», respondió cuando se le pidió un resumen de esta primera década.
Ante la consulta sobre un posible regreso al continente africano, de donde es original el rally más extremo del mundo, el francés fue contundente: «Es imposible volver por el momento», afirmó para luego explicar que el contexto político y de seguridad (motivo por el cual dejó de correrse allí) aún no son propicios para un evento de semejante envergadura.
El Dakar es el segundo acontecimiento automotor con un 77% de notoriedad en el mundo (más de 70 cadenas de TV en 190 países se hacen eco de las arriesgadas maniobras de los pilotos en un promedio de 1200 horas de difusión). Esto se debe, tal vez, o debido a que es una competencia global, donde más de 54 nacionalidades y culturas se entremezclan bajo un mismo techo y sobre la misma arena.
En esta 40ª edición se llegará a 29 países por los que pasaron los corredores del rally. Sin embargo, Lavigne no se amilana y va por más: «Tenemos fe en escribir una gran historia en este décimo aniversario» y a su vez, trata de explicar por qué el evento triunfa sea cual sea el continente en el que se desarrolla. «El ADN de la carrera es la incertidumbre, el tener que sortear varios obstáculos todos los días«, afirma orgulloso.
Desde su creación, en 1979, hasta 2007, el Dakar tuvo acción ininterrumpida en el continente africano y europeo (partía de París) pero por una amenaza terrorista la edición ’08 no pudo concretarse y allí decidieron emigrar a Sudamérica. Lavigne explica que no fue difícil la adaptación porque «los requisitos para albergar el Dakar son, principalmente, geográficos, tener las superficies pertinentes para lograr etapas difíciles pero no imposibles de realizar. En cuanto a la organización económica depende de los países y sobre todo tiene que tener un apoyo del Estado en cuanto a Seguridad, Aduana, Gendarmería, Turismo y Cultura».
«El rumbo de la Economía no repercute en el Dakar», asegura el Director General de la competencia, pero aclara que sí hace mella en los pilotos ya que condiciones desfavorables «les hace más difícil la llegada de sponsors».
El Dakar eclipsa, es cierto, pero no todo es tan pasional; el aspecto económico es primordial y por eso Lavigne explica: «Esperamos unos cuatro millones de espectadores a lo largo de las 14 etapas. Desde 2009 el impacto económico en la suma de los países dejó u$s 300 millones por año. Es una cifra enorme». A eso hay que sumarle los 4 millones de espectadores que recorren las rutas siguiendo a los pilotos y todo lo que consume la competencia en sí para llevar al campamento.
Además del rumbo económico, existe el político, al que Lavigne le da mucha importancia. «El Dakar es un evento político y necesita apoyo del país», asevera. «En Argentina hubo un cambio muy marcado (en política), súper marcado. Pero acá hay un apoyo fantástico de las Provincias. En Argentina tienen un poder muy importante. San Juan Catamarca, La Rioja, Córdoba, hemos trabajado en 20 provincias desde 2009 y es verdad que es una vitrina fantástica para ellas. Mediática, turística, con un gran impacto económico en cuanto a las visitas, a los gastos que pagamos para permanecer allí. Es realmente una inversión y un impacto súper favorable para las Provincias. Estuvimos con los Gobernadores de Salta, Córdoba y La Rioja y San Juan y los cuatro piensan igual: el Dakar pertenece a las Provincias en Argentina».
Por último, Lavigne se refirió a la ausencia de Chile en esta edición: «No está por decisión propia, del gobierno actual. El Dakar necesita el apoyo del estado, y este Gobierno no lo considera necesario. Sin autorización de las autoridades es imposible armar el evento. Organizamos desde 2009 hasta 2012 la carrera en Chile, hablamos con (Michelle) Bachelet, luego con (Sebastián) Piñera. Es una decisión de ellos la de recuperar el Dakar. Depende del deseo del país»