El Frente Sindical y las dos CTA oficializaron su apoyo a la fórmula Fernández-Fernández

Los referentes sindicales dieron a conocer un documento.  En la primera actividad de la fórmula después de la inscripción de alianzas, Alberto Fernández y Cristina Kirchner, candidatos a presidente y vice del Frente de Todos, encabezaron un encuentro con los referentes del Frente Sindical para el Modelo Nacional, la CTA de los Trabajadores y la CTA Autónoma, que ratificaron su apoyo a ese espacio.

La reunión se desarrolló en la sede de La Bancaria y volvió a mostrar en una misma foto a la expresidenta y el líder de Camioneros, Hugo Moyano, tras años de enemistad.

“Nuestra prioridad es el trabajo. Lo vamos a recuperar entre todos y todas”, aseguró Cristina en su cuenta de Twitter, y se retiró sin formular declaraciones, al igual que Alberto Fernández.

También participaron del encuentro los postulantes a gobernador y vice de ese espacio, Axel Kicillof y Verónica Magario.

Por parte del sindicalismo, además de Hugo y Pablo Moyano estuvieron Sergio Palazzo (La Bancaria), Hugo Yasky (CTA de los Trabajadores), Pablo Micheli (CTA Autónoma), Roberto Baradel (SUTEBA), Omar Plaini (Canillitas), Walter Correa (Obreros Curtidores), Abel Furlán (UOM Zárate-Campana), Vanesa Siley (FESITRAJU), entre otros.

Tras el encuentro, los sindicalistas dieron a conocer un documento donde ratificaron la constitución de la Mesa Sindical del Frente de Todos, que participará en la elaboración de las propuestas de gobierno de ese espacio y que estará abierta “a todas las organizaciones sindicales y sociales que decidan acompañar a la fórmula Fernández-Fernández”.

Los gremialistas sostuvieron que Alberto y Cristina “pueden sacar a la Nación de la situación de empobrecimiento, endeudamiento y fragilidad social a la que nos ha conducido el gobierno de Macri, sus aliados y complacientes que imponen situaciones de zozobra a los hogares argentinos con un esquema inviable”.

Además, remarcaron “la necesidad de un cambio urgente en la política económica, pues cada día se destruyen más fuentes de trabajo, se pierde más empleo, se precarizan las condiciones de vida y se dilapidan reservas, para colmo prestadas, que son imprescindibles para la recuperación productiva, no para seguir financiando la fuga de capitales en beneficio de muy pocos, a costa del pueblo argentino”.