Protesta de eurodiputados por el tono político del acto encabezado por Cristina Kirchner
Por medio de una carta, un grupo de parlamentarios manifestó su “malestar” por la forma en que se realizó la asamblea inaugural de la Eurolat, a la que calificaron de “bochornoso espectáculo”.
Un grupo de eurodiputados manifestó hoy su “profundo malestar” por el tono político que adquirió la sesión inaugural de la Asamblea Eurolatinoamericana (Eurolat) en Buenos Aires, que tuvo a la vicepresidenta Cristina Kirchner como oradora central en el Centro Cultural Kirchner (CCK). En una carta, calificaron el acto como un “bochornoso espectáculo”.
“Creemos que un acto solemne e institucional como ha de ser el de la inauguración protocolaria de la sesión plenaria de la Asamblea no puede ser instrumentalizado ni utilizado con la finalidad partidista por la que ha transcurrido el acto celebrado hoy, más propio de un mitin político que el de un parlamento democrático legislativo”, remarcaron los eurodiputados.
La protesta llegó por medio de una carta formal al presidente de la representación europea en la Eurolat, el español Javi López (del Partido Socialista de Cataluña), quien en el discurso previo al de Cristina Kirchner confesó que se sentía como “telonero de los Beatles”.
“Te solicitamos que hagas llegar al componente latinoamericano y al Senado argentino como organizador de la reunión, nuestra más rotunda protesta por la situación acaecida que dista mucho de lo que ha de ser un acto protocolario y solemne y que en modo alguno nos parece aceptable por lo que supone de falta de adecuación a la cortesía parlamentaria y al respeto institucional a la dignidad de la función parlamentaria”, advirtieron los eurodiputados.
La misiva fue firmada por Leopoldo López Gil, coordinador del grupo en la Eurolat; José Manuel García Margallo, vicepresidente del organismo junto a Herbert Dorfmann; y por los eurodiputados Krystof Hetman, Andreas Schwab, Isabel Benjumea, Jens Gieseke, Jörgen Warborn y Gabriel Mato.
López Gil es el padre del dirigente venezolano Leopoldo López, opositor al chavismo que que pasó más de cinco años preso hasta que logró escapar hacia España, en 2020. García Margallo, en tanto, fue el canciller de Mariano Rajoy entre 2011 y 2016: estaba a cargo de la diplomacia española cuando Cristina Kirchner dispuso la estatización de las acciones de YPF que estaban en manos de Repsol, el episodio de mayor tensión bilateral en las últimas décadas.